Es surrealista. En pleno siglo XXI; con la historia plagada de tragedias similares, donde sacar enseñanza; con tecnología de vanguardia al servicio de la meteorología; con satélites orbitando la Tierra; con drones de vigilancia y control inmediata; con una red de telecomunicaciones ilimitada y con vida propia; con la estadística y la algoritmia al servicio de la ciencia; y con la tan cacareada y revolucionaria IA supliendo la cortedad mental del ser humano… Qué podría fallar, sino la capacidad y eficiencia de los gobernantes para hacer política con mayúsculas, alejada de doctrinas y sectarismos y centrada exclusivamente en resolver los problemas reales de los ciudadanos. Y lo más lamentable es que, una vez que la riada de mediocridad les desborda, salen a flote sus miserias hasta el extremo, no sólo de culparse unos a otros humillando con ello a las propias víctimas… sino, de salir huyendo cobardemente de sus responsabilidades, como lo hizo el presidente más indecente de la historia reciente. ¡Desolador!     

Placido López Torres