Cuando el personal navarro vea que lo suyo apenas se puede mantener -por falta de 'energía local'- llegarán los lamentos. Y a la hora de retornar al sentido común (tan demandado ahora) la vuelta será costosa aún cuando pudiera hacerse; quien huyó en su día, y le fue bien, dificilmente volverá a territorio comanche en tantos sentidos. Además, lo que procede de esos terrritorios se mira con lupa desde el resto de España, no sé si me explico.

https://www.eldebate.com/opinion/20250218/navarra-le-atraganta-vasquismo_271219.html

El problema de los navarros es la empanada mental que tienen, gracias al supremacismo que les han inoculado sus vecinos de norte.

Es increíble observar como la ribera del Ebro la ha colonizado el partido de los herederos de eta.

Y no digamos la menestra de partidos que tienen, ya se sabe divide y vencerás.

Un pueblo que siempre habia sentido orgullo de sus orígenes, se ha convertido en un seguidista de lo más rancio y excluyente de España.

Dudo que los votantes se den cuenta de lo que están haciendo con su bella tierra. Que pena!.

El nacionalismo separatista no solo ha debilitado económicamente a las regiones que lo han abrazado, sino que también ha erosionado su cohesión social y cultural. La obsesión por imponer una identidad única y excluyente ha generado incertidumbre, polarización y fuga de talento y capital. Mientras las regiones que han apostado por la apertura y la competitividad han prosperado, aquellas que han convertido la política en un proyecto identitario han perdido dinamismo y atractivo.

La imposición lingüística, la persecución del disidente y la aversión a todo lo que huela a EXPAÑA, han convertido estos territorios en lugares menos prósperos y menos acogedores. La realidad es contundente, el éxito viene de la integración y la LIBERTAD, no del sectarismo, ni del victimismo nacionalista. EXPAÑA avanza donde hay menos barreras y más oportunidades. Quienes eligen el repliegue identitario solo cosechan aislamiento y decadencia. Palabras.